Desde hace años, los drones son utilizados con muchos fines. Son usados por parte de las empresas de mensajería, por los cuerpos y fuerzas de seguridad e, incluso, los más pequeños llegan a utilizarlos como si se tratase de un simple juguete. Pero ¿Conocemos realmente la normativa sobre drones en España?
Si no es así, es importante que leas el siguiente artículo para conocer qué pasos debes dar si estás pensando en comprar un dron. De este modo, conocerás cuáles son tus obligaciones a la hora de hacer volar este vehículo aéreo.
Normativa sobre drones en España
En España se han hecho importantes regulaciones respecto al uso de drones con el fin de proteger al usuario que los maneja y el bienestar físico, residencial y ambiental de terceros.
Estos cambios tuvieron lugar el 30 de diciembre de 2017, cuando entró en vigor la publicación del Boletín Oficial del Estado (BOE) para regular el uso civil de los drones en territorio español.
Esta nueva normativa de drones en España se inclinó a favor de los usuarios, abriendo un poco la brecha y aligerando un poco las restricciones, aunque sin dejar de lado la seguridad.

¿Cuáles eran las antiguas restricciones?
En la anterior regulación de uso de drones -Decreto Ley 17 de octubre de 2014- no estaba permitido realizar vuelos en plena ciudad ni en zonas rurales. Tampoco se permitían los vuelos nocturnos ni el vuelo fuera del alcance visual de prototipos con un peso superior a los dos kilos. Asimismo, estaban prohibidos los vuelos en espacios aéreos controlados y los vuelos dirigidos con visión aumentada.
En la nueva regulación, estos campos han recibido luz verde, siempre y cuando se ajusten a los requisitos y normas de seguridad establecidas.
¿Qué debo saber antes de hacer volar un dron?
Para hacer volar un dron legalmente es importante que nos informemos de lo que permite o no la normativa vigente en la actualidad.
¿Necesito licencia para volar un dron?
El vuelo aficionado de drones ciertamente requiere un manejo responsable por parte del usuario con el fin de no causar daños a terceros.
No obstante, la normativa de drones que rige actualmente en España no exige ningún tipo de licencia para vuelos de drones básicos para uso recreativo o hobby.
Sin embargo, quienes usan los drones a nivel profesional están obligados a tener una licencia certificada legalmente en España.
Curso de piloto de drones

La licencia certificada se obtiene a través de un curso intensivo en una academia especializada con una duración de un mes o más. Dependerá siempre de la especialización deseada.
Cabe destacar que para recibir una certificación válida, la ATO u Organización de Entrenamiento Aprobada, debe estar certificada por AESA. La Agencia Estatal de Seguridad Aérea es el ente encargado de regular todo tipo de incursión aérea en todo el territorio español. En ella está incluida también la regulación oficial en el ámbito de los drones.
Estas organizaciones y escuelas que imparten el curso de piloto de drones están acreditadas en base a la formación que pueden impartir sobre la comprensión de los drones. También sobre su funcionamiento seguro y las capacidades técnicas requeridas para el manejo a distancia de los drones profesionales.
Quienes reciben la formación en una ATO son entrenados en base a conocimientos teóricos y prácticos que les permiten recibir una acreditación certificada. Esta será entregada tras un riguroso examen de habilidades y conocimientos aprendidos.
Además, se exige un certificado médico de clase LAPL y Clase II para quienes esperan maniobrar drones con un peso superior a los 25 kilos.
Condiciones para volar drones no profesionales

Los vuelos de drones con fines recreativos no requieren cumplir con exigencias tan altas como en el caso de los vuelos a nivel profesional. Sin embargo, para manejarlos de forma segura se han establecido restricciones importantes que se deben cumplir.
Distancia respecto a aeropuertos
Entre ellas se encuentra especificada la distancia del vuelo respecto a aeropuertos. Se han establecido un total de 8 kilómetros como distancia mínima de cercanía con respecto a cualquier aeropuerto o aeródromo.
Espacios aéreos controlados
Respecto a los espacios aéreos controlados, en estas áreas está totalmente restringido el vuelo de drones por parte de aficionados.
Altura de vuelo y distancia de vuelo
El vuelo del drone no debe sobrepasar los 120 metros de altura a nivel del suelo o a nivel del obstáculo más alto que se encuentre en un radio de 150 metros de la aeronave teledirigida.
Condiciones de vuelo
Para una experiencia de vuelo más segura se recomienda volar el drone de día bajo condiciones meteorológicas pacíficas a fin de evitar accidentes. Anteriormente, estaba prohibido el vuelo nocturno, sin embargo, las nuevas normas lo permiten. El drone no debe pesar más de 2 kilos y debe tener suficiente iluminación para su ubicación. De noche el vuelo no debe encontrarse por encima de los 50 metros de altura.
Vuelos dentro del alcance visual

Los vuelos deben realizarse con el limitante del alcance visual del usuario, según la norma VLOS.
Vuelos en la ciudad y sobre aglomeraciones de personas
Anteriormente, estaban prohibidos los vuelos de drones sobre aglomeraciones de personas, al igual que en áreas urbanas y rurales. No obstante, esta regla cambió para los drones de 250 gramos. Actualmente, está permitido realizar vuelos a una altura no mayor a los 20 metros y a una distancia prudencial de las edificaciones circundantes.
Seguro de responsabilidad civil
Este tipo de seguro no es obligatorio para volar drones de menos de 250 gramos de peso con fines recreativos. Sin embargo, en vista de los posibles riesgos de causar daños a terceros, es recomendable poseerlo.
Áreas permitidas para hacer vuelos recreativos
Los drones son considerados aeronaves debido a que entran en el espacio aéreo, el cual no nos pertenece. Por lo tanto, es necesario saber que no en todas las áreas está permitido realizar vuelos con drones. No respetar las zonas de vuelo controlado o restringido puede dar pie a la aplicación de multas al usuario por parte de las autoridades.
Identificación de un dron
Por otro lado, la nueva ley exige, tanto a pilotos profesionales como a aficionados que usan su drone como hobby, que la aeronave y el control remoto estén claramente identificados.
De este modo, se debe especificar en el aparato, a través de una placa ignífuga identificativa, el nombre del propietario y los datos necesarios para poder contactar con el mismo.